Navidad natural | Promover compras responsables en las fiestas de fin de año con decoración sustentable y regalos del bosque
La Red de Comunicadores Forestales y Ambientales de América Latina y el Caribe (RECOFALC) se propuso impulsar una campaña que ayude a desmitificar el uso de los árboles artificiales por sobre los naturales. «Estos se producen principalmente a partir de petróleo, generando una alta huella de carbono. Además, su transporte a largas distancias y su desecho posterior en toneladas de plástico y hierro agravan su impacto ambiental. Optar por árboles naturales cultivados localmente no solo reduce el impacto en las emisiones, sino que también fomenta economías locales y el uso sostenible de la tierra?, destacan desde RECOFALC.

TE PUEDE INTERESAR
Paraguay | Las plantaciones se convirtieron en instrumentos de desarrollo territorial y de generación de empleo digno, destacan desde INFONA
Plantaciones en distintas fases, control de hormigas y malezas, podas y raleos, cosecha mecanizada, tecnología aplicada al campo e integración completa del ciclo productivo formaron parte de la propuesta del CREA Forestal en su Jornada de Actualización Técnica – JAT Forestal 2025. El evento se realizó el viernes 14 de noviembre, en la Estancia Ñemity, ubicada en San Juan Nepomuceno, Caazapá, donde se encontraron productores agropecuarios, técnicos, contratistas, estudiantes y empresas del rubro para observar en acción el negocio forestal del futuro.
El segundo humedal más grande de Sudamérica se encuentra en Argentina: de cuál se trata
Argentina tiene parques nacionales que la colocan en un escalón único dentro de América del Sur, compitiendo con otros 300. ¿Cuál es el más grande? América del Sur alberga más de 300 parques nacionales, pero muchos pasan desapercibidos. Hay extensos humedales que han sido objeto de importantes proyectos de restauración ecológica, hasta montañas costeras con una profunda herencia indígena. Hoy te contamos el caso de uno ubicado en Argentina.
Los expertos no dan crédito pero este árbol es el más antiguo del mundo y sigue dando frutos: tiene 4.000 años
La naturaleza guarda secretos que desafían el paso del tiempo, y uno de los ejemplos más sorprendentes es un árbol que, con aproximadamente 4.000 años de antigüedad, continúa dando frutos en la actualidad. Este ejemplar se ha convertido en un símbolo de resistencia y longevidad, capaz de sobrevivir a cambios climáticos, transformaciones del paisaje y la propia actividad humana





















